La Planificación

Llegó la hora, llegó el momento de llevar los sueños a la realidad, ¿pero por dónde debemos empezar?

Nuestro Señor Jesucristo nos dice: “Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?” (Lucas 14: 28 RVR1960), es decir debemos analizar nuestras fortalezas, nuestras debilidades, las oportunidades y amenazas que conlleva llevar a buen término lo que nos proponemos.

Así enfocar nuestras energías y recursos de una manera ordenada en los objetivos que nos trazamos y no perder el tiempo que es muy valioso al cometer errores por falta de planificación.

“Los planes del diligente solo traen ganancias. Los del precipitado, solo indigencia.” (Proverbios 21: 5 Biblia Textual, 1999), entonces tomar lápiz y papel (salió a relucir de que época soy), digo el computador y empezar a ordenar los pasos que debemos seguir para llevar a cabo nuestros planes.

También debemos rodearnos de buenos consejeros, tomar en cuenta las consideraciones que nos dan, tal como lo indica la palabra en Proverbios 15:22 (NVI): “Cuando falta el consejo, fracasan los planes; cuando abunda el consejo, prosperan.” Escuchemos la sabiduría de quienes por su experiencia pueden enriquecer nuestros proyectos.

Pero lo más importante, como todo lo que emprendemos en el transcurso de nuestra vida, someter a la consideración de Dios nuestras ideas y contar con su visto bueno, tal como se dice en Proverbios 16: 3 (NVI): “Pon en manos del Señor todas tus obras, y tus proyectos se cumplirán.”, si Él está de acuerdo contaremos con su respaldo y sin duda podremos alcanzar lo propuesto, sin temor al fracaso, pues aunque en el transcurso de la vida hay tropiezos, al mirar atrás nos damos cuenta, que los mismos sirvieron para buscar soluciones y madurar, ser creativos, ver con quienes contábamos realmente, enderezar el rumbo y enfocarnos en lo verdaderamente importante.

Bueno, que primeramente Dios ese sueño o proyecto que tienes en tu vida lo puedas llevar a cabo, así que a planificar los pasos que se deben dar.

- Gustavo Arias